Seguro
que te ha pasado alguna que otra vez que, al volver a casa cansado, después de
haber estado todo el día trabajando, cuando tratas de abrir la puerta del
garaje, pulsas el mando y la puerta no se abre. Antes de que llames a un servicio
de reparación de puertas automáticas en Las Palmas para que vengan a repararla es conveniente que
hagas unas pequeñas comprobaciones.
Muchos de los avisos que recibimos para la reparación de puertas automáticas en Las Palmas no serían necesarios
si la persona que nos ha llamado hubiera comprobado antes de coger el teléfono
que el mando que utiliza habitualmente no tiene las pilas gastadas. Casi todos
los mandos tienen un pequeño LED de color rojo que se ilumina cundo se aprieta
uno de los botones. Si la luz no se enciende es que hay que cambiarle las
pilas.
Si hecha esta comprobación la puerta sigue sin abrirse, puede ocurrir también
que haya habido un corte de luz en la casa y por eso el motor de la puerta, que
funciona con electricidad, no se pone en marcha. Antes de avisar al servicio de
reparaciones, comprueba que al motor le llega energía.
Otras veces, lo que ocurre es que hay algún objeto que impide que la puerta se
pueda abrir. Bien sea porque obstaculiza su movimiento o bien porque interrumpe
el haz de los sensores de seguridad y estos, automáticamente, impiden su
funcionamiento. También pude ocurrir que al acumularse demasiado polvo, o
papeles en los raíles estén obstaculizando el movimiento de la puerta.
Sólo después de haber hecho estas comprobaciones, si la puerta sigue sin
abrirse, llama a Puertas Automáticas Agustín Romero y
resolveremos el problema.